• Fallos en el sistema eléctrico de la vivienda: Especialmente en las casas con algo de antigüedad, es muy común que algún cable suelto provoque algún tipo de cortocircuito que termina por hacer fallar la totalidad del sistema. Si observas que al poner en funcionamiento una determinada fase, se ha ido la luz es muy posible que se trate de un chispazo.
• Una tormenta o malas condiciones climatológicas en el exterior: En este caso hay poco que podamos hacer, más allá de proteger nuestros electrodomésticos con un seguro de hogar que cubra los posibles gastos ante una avería derivada de la tormenta. Tocará esperar a que vuelva la luz.
• Un fallo en un electrodoméstico: Generalmente suele tratarse de un error en la resistencia. Por suerte en este caso, se trata de un problema fácilmente identificable ya que el apagón se produce siempre inmediatamente después de encender o poner en funcionamiento el aparato. Si notas que salta el diferencial a menudo sin una causa clara, es posible que alguno de los electrodomésticos que sueles tener siempre en marcha, como puede ser la nevera, tenga un problema en su resistencia que esté provocándolo. Aunque ante la duda, lo más aconsejable siempre es consultar a un profesional.
• La potencia eléctrica que tienes contratada no es suficiente para responder ante la demanda de energía en ese determinado momento. Seguramente se trate de la causa más común de todas las expuestas y al mismo tiempo, la más evitable. Utiliza nuestra calculadora de potencia para calcular si tu potencia contratada se ajusta a la que realmente necesitas.

La explicación reside en el nivel de potencia contratada del que dispongas por contrato. Lo que ocurre en estos casos es que el consumo procedente de la luz y los electrodomésticos que tengas en funcionamiento en ese momento, es superior a tu nivel de potencia contratado. Es por ello que se produce el apagón, ya que tu tarifa no es suficiente para hacerse cargo de esa elevada demanda.

Suele ocurrir al activar algún electrodoméstico que suponga un aumento del consumo eléctrico importante a la hora de desarrollar su función, como es el caso de la lavadora o el lavavajillas.

Para evitar este tipo de situaciones incómodas, lo más recomendable es conocer previamente qué nivel de potencia contratada puedes llegar a necesitar y en base a ello, elegir el tipo de contrato que más se ajuste a tus necesidades.